ONG local APS

Seguimiento de proyectos.

Los siguientes  2 días de trabajo son con la  organización APS (ASSOCIATION POUR LA PAIX ET LA SOLIDARITÉ).  Llevan una veintena de años como socios locales, así que no se necesita averiguar más sobre la organización como en el anterior caso. Son bien conocidos. Haré seguimiento de proyectos, o sea de 4 “forages” recién acabados, situación para la población beneficiada bien bien diferente:  ¡¡YA DISPONEN DE AGUA POTABLE!

 

28 de julio: Debido a las fuertes e intensas lluvias, hace dos días que Mariam duda de si podremos llegar a las comunidades del Este. Está en contacto con el representante en la zona. Estamos barajando un cambio de calendario. Finalmente esta mañana han comunicado desde allí que sí podremos llegar. Partimos Mariam, su hijo Uriel y Elie hacia el Noreste de la capital, en las inmediaciones de Ziga. Keivin se quedará haciendo otras gestiones.

 

Al llegar a la zona nos espera el representante de la organización: nos conduce hacia la primera comunidad, Tibin. El agua ha inundado varios tramos del camino de tierra, y zas! Nos quedamos atascados en el barro. Normal en estas fechas del año. Por arte de magia sale gente de todos lados y se unen para ayudar a sacarlo del barrizal. Traen troncos, ramas, piedras... Luego seguimos una parte del camino descalzos, cruzando varios riachuelos que se han formado. 

 

¡Ay! ¡Qué diferencia con los días anteriores! Las comunidades de Tibin y Sabin que visito del plan previsto tienen “forages” recién construidos, y eso se nota en sus caras… La dureza que he visto en las comunidades anteriores ha cambiado. Las condiciones de vida han mejorado notablemente aun siendo época de lluvias, sobre todo en el descenso de las enfermedades gastrointestinales. Los impactos positivos  se harán más notables en la estación seca.

 

Quieren mostrarme ilusionados cómo funciona, y al acabar la reunión todos acuden al “forage”: accionan en turnos, entre risas y juego,  la palanca del sistema de bombeo de agua para llenar sus bidones. Como señal de respeto y de higiene, dejan sus chancletas fuera del recinto.

 

Las mujeres dan de beber a sus bebés que llevan en brazos con los recipientes de calabaza. La sonrisa se denota en sus rostros… ¡Es una gran alegría que contagia a todos los presentes! 

 

Antes de partir improvisan unas danzas con cantos para nosotros ¡qué maravilla!, y, a pesar de que no nos podemos entretener por todo el retraso que llevamos, las disfruto en esos escasos minutos.

Además, como de costumbre estos días, ha surgido una nueva petición de “forage” en otra comunidad que no estaba en el planning, la de Soubnkora. Hacemos la reunión también. Nos agradecen la escucha y nos ofrecen, como en otras comunidades, lo que creo yo que tiene más valor para ellos: parte de su alimentación: gallinas, pintadas y huevos. No puedo dejar de ver la otra parte: me pregunto cuánto les habrá costado criar a estas aves en estas duras condiciones y sabiendo que la mayor parte de lapoblación rural burkinesa vive con menos de 1 dólar diario[1] … y que según informes de las Naciones Unidas es de los países con menor nivel de desarrollo humano[2], o sea, de los países más pobres del mundo[3].


 Con Marian Simpaore de la organización CEC Espoir, recibiendo el agradecimiento de la comunidad de Soubnkora

 

El regreso a la capital ha sido bien largo, rodeando caminos para evitar quedar atascados como a la ida. De nuevo con intensa lluvia, por suerte sin viento y con mejor visibilidad que el día anterior. Elie conduce muy prudentemente, todos ponemos atención en la carretera, y lo único que se oye aparte de los goterones que caen contra el geep, son las gallinas que han ofrecido los miembros de la comunidad, acompañándonos  el "KOKOKOK !  KOKOKOK" !


29 de julio: Esta mañana Keivin me avisa que antes de partir hacia el Sud Oeste como estaba previsto, pasaremos por su oficina para entrevistar a 4 miembros de la  comunidad de  Wamkango que se han desplazado en moto unos 60 Km hasta la capital para solicitar un “forage”.

 

Esto es corriente en la zona: cuando hay una necesidad importante desde las comunidades para contactar con las asociaciones burkinesas que operan en la zona y suelen conocer, se dirigen a las oficinas centrales. Y es que ¡conseguir un pozo en una cuestión de vital importancia para ellos! Han sabido que estamos haciendo el seguimiento de proyectos y ¡en marcha a la capital!

Es Uriel quien me hace de traductor, mientras Keivin organiza otras cuestiones en su sede. ¡Está muy ocupado con llamadas telefónicas!

Keivin Ouedraogo, responsable del APS, despide en la sede de la ONG a los miembros desplazados en moto 60 Km  desde su comunidad.

 

Partimos hacia las provincias de Baziega y Kadiogo, hoy más cerca de Ouagadougou, a tan solo unos 30 Km. ¡Eso se me hace muy corto después de las distancias de estos días!  

 

En la primera comunidad, la de Ipelce, atravesamos el últimos tramo a pie cruzando un río, observando la distribución de las especies de la sabana arbolada: acacia, neem, mango… La mayoría son espinosas para aguantar en la estación seca.

 

Mientras van llegando los miembros de la comunidad, vamos a visitar a una familia de la etnia peul contigua al pozo. Sus viviendas son diferentes, redondas y con hoja de palma, no de barro. Su hospitalidad se ve plasmada, nos muestran sus utensilios, el secado de plantas,  ofrecen sus frutos de karité recolectados. Se adornan con pendientes y collares muy característicos.

 

Ya de vuelta al recién construido “forage”, Iniciamos la reunión en los cuales se denotan los cambios de la población beneficiada.

 

Antes de partir bajan del árbol unos frutos para Keivin, y mientras converso con los niños y niñas. A partir de 6 años ya saben francés, pero los de la etnia peul apenas van a la escuela (se está realizando un trabajo de sensibilización para lograrlo, ellos vienen de una cultura nómada bien diferente) y es más difícil comunicarse mediante el idioma, aunque las señas y risas afloran... Les dejo ver mi pasaporte, se lo pasan de una mano a otra y  curiosean.

Es hora de irnos. La mayoría del grupo nos acompaña en el camino, conversando con las muchachas y niños,  y una vez cruzamos el riachuelo, nos despedimos.

 

Ya hacia Bazoulé, localidad conocida turísticamente por la laguna con cocodrilos, realizamos la última reunión en uno de sus barrios.  De nuevo una gran diferencia al tener agua potable disponible en todo momento junto a sus casas. Tan solo hace 2 semanas que se acabó de construir el pozo, así que será en la época seca cuando notarán aún más sus beneficios.

 

Hoy acabo mi trabajo con la ONG APS: 4 seguimientos de nuevos “forages” y 2 demandasEn estos 2 días de trabajo con la Asociación  veo como también se considera el tema de género así como la organización de comités para gestionar la organización y mantenimiento de los “forages”.

 

Los beneficios del acceso al agua potable que nos transmite la población local son principalmente la poca distancia a recorrer la mejora de la salud,  de higiene y el disponer de más tiempo que les permitirá realizar otras actividades. Desde febrero que se secan las lagunas formadas en la época lluviosa, hasta la llegada en julio de las lluvias, es cuando se va a notar aún más la mejora de calidad de vida de la localidad beneficiaria.

 

Por otra parte, me fascina que en una misma comunidad habiten y convivan etnias tan diferentes, y según me explican, no hay enfrentamientos entre ellos. Bajo la expresión "faire le fou pour ne pas devenir fou", transformando los encuentros entre diferentes etnias en juego para evitar tensiones. Los moosi son la mayoría: hablan la lengua moré. Las minorías que he encontrado son los Bwaba  (lengua Bwamou ), Dagara (Ddgara), Gurunsi  (Gurunsi), Peul (Fulfelde), Sissalá ( Sissalá), de entre ¡¡¡más de 60 etnias y lenguas en el país!!!! Los peul son los más diferentes, pues hasta hace algunos años fueron nómadas y les cuesta adaptarse a algunos aspectos del sedentarismo, como escolarizar a sus hijos.

 

La visita a la fábrica de manteca de karité en esta región no ha sido posible. Me interesaba mucho ver todo el proceso de un producto tan tradicional e importante  en esta región africana, pero al hacer la llamada del contacto que tenía, me contestan que es época de vacaciones y que está cerrada. En las salidas de estos días he visto cómo la secan al sol en los patios interiores de las casas.

 

La visita a la fábrica de manteca de karité en esta región no ha sido posible. Me interesaba mucho ver todo el proceso de un producto tan tradicional e importante  en esta región africana, pero al hacer la llamada del contacto que tenía, me contestan que es época de vacaciones y que está cerrada. En las salidas de estos días he visto cómo la secan al sol en los patios interiores de las casas.

 

Han sido unos días muy enriquecedores, intensos,  agotadores también, pero la novedad y la ilusión me dan fuerzas y energía para estar allí activa y bien presente. Me da la sensación de que  llevo muchísimo más de una semana en Burkina Faso!

 

Por la noche preparo algo de equipaje para ir hacia el Sur del país, mi segunda etapa del viaje.