¡En ruta a las comunidades!

Los primeros 4 días de trabajo son con la  organización AEVS (ASSOCIATION EAU VIE SAHEL). Meses antes su coordinador general Hubert Crepin, había contactado con Montse en Ouagadougou. Será la primera vez que se trabaja con ellos para el tema de los "forages", así que intento conocer más sobre la organización, cómo intervienen, su filosofía de actuación, etc.

 

23 de julio: a las 7 de la mañana Hubert me recoge y partimos hacia  el Sur para trabajar 2 días en la provincia de Sissili y Departamento de Boura, una de las 3 áreas de intervención del AEVS. Vamos a estar muy cerca de la frontera con Ghana.

  

Durante el camino que se alarga unas 4 horas, a más de 220 Km de la capital, todo me parece interesante: cómo se distribuyen y a qué se dedican los comercios a lo largo la carretera, cómo se desplazan los habitantes (desde bicicletas y carros hasta grandes camiones cargados hasta los topes de diversos productos), los paisajes, los asentamientos urbanos, tipología de construcción,… Y cómo cargan los medios de transporte hasta el máximo!!! Motos con vacas, con muebles, furgonetas a tope, carros llenas de chiquillos y alguna mujer junto con bidones de agua, etc.

 

 

Paramos en un puesto de la carretera a tomar algo, así aguantamos hasta la noche. Antes de apearnos se acercan vendedoras de frutas, compramos bananas para estos días. Elije cuidadosamente un puesto conocido y me indica de lavar el mango antes de que me lo coma. Tiene muy presente la higiene para evitar enfermedades a los que venimos de países no africanos.

 

¡Se hace presente la deforestación! Veo montones de carbón en las cunetas de la carretera para vender, camiones cargados de troncos de madera,… De hecho en estos países es la principal  fuente de combustión para cocinar. Le pregunto a Hubert y asiente con tristeza. Opina que debería haber una mayor protección de este recurso y sobre todo de más y de adecuada GESTIÓN.

 

Cuando dejamos la carretera principal, me fascina el color rojizo de la ruta no asfaltada. Ya aparece más vegetación, y el tipo de transeúntes cambia completamente. Un grupo de mujeres caminando no sé cuántos quilómetros con sus chiquillos a las espaldas y los recipientes repletos sobre su cabeza, contrasta con vehículos 4x4 que pasan a toda velocidad, y que por suerte para ellas al haber llovido estos días no levantan polvareda. Niños pescando en las presas junto a la carretera, más carros con familias para transportar agua, chicas en bicicleta cargadas con sacos de grano, vacas sobre las motos,… En fin, una población rural que denota sus actividades cotidianas.