Las mujeres en las aldeas

He querido dar un espacio a las mujeres en las reuniones, que sean más participativas, ya que principalmente hablan las autoridades o representantes que suelen ser hombres y ellas quedan fuera de juego. Se ve incluso en cómo se distribuyen para la reunión: los hombres en sillas o bancos, las mujeres y niños en otro lado en segundo término, y generalmente aunque dependiendo de la disponibilidad de bancos, en el suelo. En alguna ocasión estaban a mis espaldas, y pedí que girasen y movieran la silla que me asignaban (no me pusieron ninguna objeción), y así quedaban dentro del "círculo".  Podíamos vernos todos.

 

Realmente cuando se les ofrece la oportunidad de intervenir, las mujeres explican sus problemas y difíciles condiciones de vida. También observo su espíritu emprendedor, pues no solo reiteran la petición de agua potable en su comunidad, sino el acceso a microcréditos para invertir en cría de ganado, etc. y poder comerciar localmente para generar ingresos en la familia. En varios poblados han tenido la experiencia anteriormente, pero lo han abandonado por tener que devolver al banco un alto porcentaje y en breve periodo de tiempo, difícil de cumplir, y por tanto no salir beneficiadas. Este mismo problema pasa en otros lugares del mundo, como en la India [1] donde las supuestas beneficiadas han llegado a perder incluso sus propiedades, sus vidas... Todo depende de qué parámetros se establecen. Si está llevado por Organizaciones No Gubernamentales sí se mejorarán las condiciones de vida de la población, como el caso de la Fundación Vicente Ferrer. 

 

Otra solicitud muy demandada es los molinos de grano. La subsistencia básica de la población rural son los cereales, y cada tarde son las mujeres las que se encargan de moler el grano manualmente, o se desplazan a poblados vecinos con molino, caminando, y en el mejor de los casos, en bicicleta. Las familias africanas son amplias, y puedan llegar a cocinar para unas 30 personas o más. Eso les lleva tiempo, que en la época de lluvias es exhausto para ellas debido a la jornada completa que pasan en el campo preparando los cultivos, además del tiempo que necesitan para ir a buscar agua, para lavar la ropa a mano donde puedan abastecerse de agua (nunca en la propia casa), para cuidar a los hijos, para... Por ello también demandan si es posible financiar un molino en su comunidad. Bien explicamos tanto la ONG local como yo que la prioridad son los “forages”, sin embargo tomo sus peticiones y las anoto, tanto por respeto a ellas como por posibles alternativas en un futuro… Quien sabe…

 

Me ha gustado mucho que en varias ocasiones el “chef du village”, la máxima autoridad tradicional de la comunidad, ha intervenido en las reuniones a favor de las mujeres, incidiendo en que son ellas las que sufren más por la falta de agua potable, por todo el trabajo que soportan encima: ir en la búsqueda de agua y cargarla, trabajar en los campos en época de lluvia, moler el grano, cocinar para familia extensa, etc.